sábado, 4 de abril de 2015

TIEMPO DE PASCUA: DISCÍPULOS MISIONEROS DE LA ALEGRÍA

¡Feliz Pascua de Resurrección!

“El corazón humano desea la alegría. Cada familia, cada pueblo aspira a la felicidad. Pero, ¿cuál es la alegría que el cristiano está llamado a vivir y ser testigo? Es aquella que viene de la cercanía de Dios, de su presencia en nuestras vidas. Desde que Jesús entró en la historia, con su nacimiento en Belén, la humanidad recibió la semilla del Reino de Dios, como una tierra que recibe la semilla, promesa de la futura cosecha. ¡No se necesita buscar más en otra parte! Jesús vino a traer alegría a todos y para siempre. No se trata sólo de una alegría esperada o pospuesta al paraíso, sino de una alegría real y palpable ya ahora, porque Jesús mismo es nuestra alegría, es nuestra casa, con Jesús la alegría está en casa ¿sin Jesús hay alegría? No. Él está vivo, es el Resucitado, y obra en nosotros y entre nosotros, especialmente con la Palabra y los Sacramentos.

Todos nosotros bautizados de la Iglesia, estamos llamados a aceptar siempre nuevamente la presencia de Dios entre nosotros y ayudar a otros a descubrirla, o redescubrirla si es que se hubieran olvidado. Es una hermosa misión, como la de Juan el Bautista: orientar las personas a Cristo - ¡no a nosotros mismos! - Porque Él es la meta hacia la cual el corazón humano tiende cuando busca la alegría y la felicidad.

Aún San Pablo, en la liturgia de hoy, indica las condiciones para ser "misioneros de la alegría": orar con perseverancia, dar siempre gracias a Dios, entregarse a su Espíritu, buscar el bien y evitar el mal (cf. 1 Ts 5,17- 22). Si esto va a ser nuestra forma de vida, entonces la buena noticia podrá entrar en tantos hogares y familias y ayudar a la gente a redescubrir que en Jesús está la salvación. En Él es posible encontrar la paz interior y la fuerza para enfrentar cada día las diferentes situaciones de la vida, incluso la más pesada y difícil.

martes, 31 de marzo de 2015

CELEBRACIÓN DE LA MISA CRISMAL EN LA CATEDRAL DE TENERIFE


El obispo Bernardo Álvarez preside este Martes Santo a las 11.00 horas la Misa Crismal en la Catedral de La Laguna, que se celebrará con todos los presbíteros de la Diócesis y no en la mañana del Jueves Santo para facilitar la presencia del mayor número posible de clero.

El obispo de Teneride preside este martes la Misa Crismal Ampliar foto Según ha informado el Obispado, junto con la fiesta del día del patrón del clero, es el momento en el que produce una mayor asistencia de sacerdotes en una misma celebración. En ella, además, se consagrará el Santo Crisma que se emplea para el bautismo, la confirmación y la ordenación sacerdotal, y se bendecirán los óleos de los catecúmenos y de los enfermos.

Más de un centenar de sacerdotes venidos de las cuatro islas que forman la Diócesis Nivariense participarán en la eucaristía del Martes Crismal, donde renovarán las promesas sacerdotales que realizaron el día en que fueron ordenados. En la Misa se recordará, además, a los curas fallecidos desde la última Misa Crismal, y se dará gracias por los nuevos ordenados y por aquellos que cumplen sus bodas de oro o de plata en el ministerio presbiteral.

En este momento, en la diócesis de San Cristóbal de La Laguna hay 312 parroquias que atienden pastoralmente 150 párrocos. Los sacerdotes incardinados y residentes en la diócesis son 210. La edad media de todo el clero es de 58 años. Ahora bien, la de los párrocos es de 53 años y la de los jubilados es de 82. La media de los presbíteros en La Gomera es de 33 años y en El Hierro de 36. Hay, además, 19 sacerdotes con alguna otra actividad pastoral no parroquial; 25 curas jubilados y 2 enfermos. Fuera de la diócesis se encuentran 14 presbíteros, bien ampliando estudios o trabajando pastoralmente en otros lugares. Además, en la diócesis prestan su servicio 6 diáconos permanentes.